mi primera lente fija
Cada año me contengo menos para autoregalarme mis reyes, y hoy ha caído el de este año: un Sigma 24mm Super-wide II F2.8. Quería un objetivo luminoso para callejear y para interiores, y éste se convierte en un 36mm que espero que me de bastante juego.
Sólo lo he usado diez minutos, así que os dejo mis primeras pruebas con él.
De momento, creo que por fin tengo algo con un bokeh decente, y una nitidez bastante mejor que la que tenía mi objetivo del kit en esa focal. Ahí va un recorte al 100% de la primera foto (sin ningún tipo de enfoque por software) para que me digáis qué os parece. Espero que a nadie le den repelús las heridas que tiene en el borde del ojo, pero oye.. ¡un gato sin heridas no es un gato!
En fin, que para mí ya llegaron los reyes. Ahora tengo todas las navidades para sacarle el juguillo